Pasar la ITV no es solo un trámite obligatorio: es una medida esencial para garantizar que los vehículos que circulan por nuestras carreteras cumplen unos mínimos de seguridad y respeto al medio ambiente. En el caso de las motocicletas y quads, una parte significativa de los rechazos se debe a un problema tan básico como común: fallos en el alumbrado y la señalización.
Según datos del Ministerio de Industria y Turismo correspondientes al año 2023, analizados por la asociación AECA-ITV, el 32,4% de los defectos detectados en motocicletas están relacionados con este apartado. Es decir, casi uno de cada tres fallos detectados en las ITV tiene que ver con luces que no funcionan, intermitentes en mal estado o pilotos que no cumplen con los requisitos.
Este dato llama la atención especialmente porque, en la mayoría de los casos, se trata de defectos visibles y relativamente fáciles de detectar antes de acudir a la inspección. Sin embargo, siguen siendo el principal motivo por el que muchas motos no superan la ITV a la primera.
En total, durante el último año se inspeccionaron 1.289.378 motocicletas y quads en las estaciones de ITV de toda España. El 84,3% superó la inspección a la primera, y esa cifra se elevó al 93,9% en segundas inspecciones, una vez subsanados los defectos.
Estas cifras son positivas, pero también ponen sobre la mesa una realidad preocupante: hay un 15,7% de motos que presentan algún tipo de defecto que impide su aprobación en la primera revisión. Y dentro de esos fallos, el alumbrado y la señalización se llevan la peor parte.
¿Qué se revisa exactamente en el apartado de alumbrado y señalización?
Aunque pueda parecer un aspecto sencillo, las exigencias técnicas en este capítulo son muy concretas. Durante la inspección, se comprueba:
- El correcto funcionamiento de todos los sistemas de iluminación: luces de posición, cruce, carretera y freno.
- El estado y visibilidad de los intermitentes, tanto delanteros como traseros.
- El funcionamiento del piloto trasero y la luz de matrícula.
- La correcta alineación y orientación de los faros.
- La fijación de los elementos: no deben estar sueltos ni dañados.
Cualquier defecto en estos sistemas, desde una bombilla fundida hasta un intermitente de color incorrecto o una luz mal orientada, puede derivar en un rechazo.
Un fallo fácil de evitar
Uno de los puntos más llamativos es que, en muchos casos, estos fallos pueden detectarse y solucionarse con una simple revisión previa. Comprobar las luces antes de acudir a la ITV, cambiar bombillas defectuosas o ajustar el faro delantero son acciones que no requieren grandes conocimientos técnicos ni herramientas especializadas.
Sin embargo, no todos los usuarios prestan atención a estos detalles, ya sea por falta de tiempo, desconocimiento o descuido. Este hábito lleva a que defectos fácilmente evitables se conviertan en motivo de rechazo.
Variaciones por comunidad autónoma
El informe también revela importantes diferencias regionales en cuanto al porcentaje de motos que no superan la inspección a la primera. Asturias encabeza la lista con un 24,4% de rechazos, seguida de cerca por Baleares (18,9%). En el extremo opuesto, Ceuta registra el menor número de rechazos, con solo un 4,95%.
Estas variaciones pueden deberse a múltiples factores, como la antigüedad media del parque móvil, el clima, la cultura del mantenimiento o incluso la rigurosidad de las inspecciones en cada comunidad.
Las motos son cada vez más antiguas
Otro de los factores que explican el número de defectos detectados es el envejecimiento progresivo de las motocicletas en circulación. En los últimos seis años, la edad media de estos vehículos ha pasado de 15,2 años en 2017 a 16,8 en 2023, lo que supone un incremento del 11%.
A mayor antigüedad, más posibilidades hay de que existan fallos en componentes como los faros, pilotos o conexiones eléctricas. Además, en motos más viejas es común que se hayan realizado modificaciones o reparaciones no homologadas que afectan a los sistemas de señalización.
Según Guillermo Magaz, director gerente de AECA-ITV, “el aumento en la edad del parque de motocicletas le otorga una mayor importancia a la ITV. A mayor antigüedad, mayor número de defectos presentes en la inspección, por lo que estadísticamente son vehículos más inseguros y menos respetuosos con el medio ambiente”.
Recomendaciones para pasar la ITV sin sorpresas
Si tienes una moto y te toca pasar la ITV, aquí van algunos consejos sencillos para evitar un rechazo por fallos en alumbrado y señalización:
- Revisa todas las luces unos días antes: posición, cruce, carretera, freno, intermitentes y matrícula.
- Sustituye bombillas fundidas y asegúrate de que son del color y tipo homologado.
- Comprueba que los faros estén bien alineados y que no deslumbren.
- Verifica que no haya conexiones sueltas ni componentes deteriorados.
- Evita modificaciones no homologadas en el sistema de iluminación o señalización.
En definitiva, cuidar el alumbrado y la señalización no solo aumenta las probabilidades de aprobar la ITV a la primera, sino que también es una cuestión de seguridad vial básica. En un vehículo tan expuesto como la motocicleta, ver y ser visto puede marcar la diferencia. Una simple revisión previa, además de ahorrarte tiempo y dinero, puede salvar vidas.




