A veces, la vida nos da sorpresas. Esto incluye a los propietarios y a los trabajadores de los talleres mecánicos de automoción y de los servicios técnicos oficiales.

Y es que, si perteneces a este sector, es muy posible que estés totalmente convencido de que los coches rentables para el taller han de tener cierta antigüedad. Y si así es, has de saber que no estás en lo cierto.

Así lo confirman los datos estadísticos que baraja el Grupo Solera, que provienen de las operaciones de reparación y mantenimiento efectuadas en sus talleres. Esos datos indican claramente que los coches más rentables para el taller son aquellos que tienen menos de cinco años. 

Añadimos que una cosa es la rentabilidad y otra la cantidad bruta de facturación. Es decir, puede ser que en tu taller recibas más vehículos antiguos que relativamente nuevos. Pero eso no significa que los primeros sean individualmente más rentables que los segundos.

¿Crees que estas afirmaciones no están fundamentadas? Pues lo cierto es que en tallergp.com opinamos lo contrario. Conque sigue leyendo para conocer nuestras razones.

¿Son fiables los datos del Grupo Solera?  

Nosotros creemos que sí. De hecho, el Grupo Solera es el titular de varios concesionarios oficiales (y sus correspondientes servicios técnicos) en la provincia de Cádiz. En concreto, de las marcas Ford, Volkswagen, Audi, Hyundai, Mazda y Skoda.

Es decir, son miles los vehículos que anualmente pasan por sus servicios técnicos oficiales. Además, el Grupo Solera está integrado en Pro Service, el centro de distribución de recambios originales del Grupo Volkswagen en España.

Los coches más rentables para el taller: matrícula que empieza por la letra «L»

Solventadas las dudas acerca de la fiabilidad de los datos de Solera, este grupo ha elaborado un informe en el que se señala que los coches rentables para el taller no son los más antiguos, sino aquellos cuya matrícula comienza por «L». Hablamos de vehículos de entre 3 y 5 años de antigüedad.

El dato concreto es que, pese a que solo representan el 13% del parque automovilístico, concentran tres de cada diez reparaciones o mantenimientos y el 27% de la facturación correspondiente a esos dos conceptos.

Los segundos en rentabilidad llevan una matrícula que comienza por «M»

Asimismo, y sorprendentemente, los datos de Solera muestran que los vehículos con la letra «M», matriculados entre los años 2022 y 2023, son los segundos coches más rentables para el taller.

Y es que solo representan el 7% del parque automovilístico en circulación, pero suponen un 15% de la facturación correspondiente a reparaciones y mantenimientos.

Los vehículos menos rentables para el taller

Por eliminación, no están incluidos entre los coches más rentables para el taller los que tienen más de 5 años de antigüedad.

Es decir, aquellos cuyas matrículas comienzan por «B», «C», «D», «F», «G», «H», «J» y «K». Y aún son menos rentables los que tienen distintivo provincial.

El motivo es que, aunque porcentualmente son mayoría (el 80% del parque), la facturación por mantenimientos y reparaciones representa solo el 56% del total.

¿Por qué ocurre este fenómeno que es aparentemente contrario a la lógica?

Todo tiene su explicación: los coches más viejos no suelen entrar en el taller si presentan fallos que no les impiden circular. Además, cuando lo hacen, sus propietarios solo quieren que se les practiquen las operaciones imprescindibles para que puedan seguir rodando o superar la ITV.

Por el contrario, los propietarios de vehículos relativamente nuevos acuden al taller en cuanto observan la más mínima disfunción. Además, son conscientes de que no llevar los mantenimientos al día es una causa de invalidación de la garantía del vehículo.