La pintura de paragolpes de plástico se ha convertido en una tarea habitual en los talleres de la región, especialmente cuando se trata de piezas recién fabricadas. 

Según las proyecciones de Spies Hecker, reconocida marca de pintura de Axalta, se espera que el mercado internacional de paragolpes de plástico crezca a una tasa compuesta anual del 5,5% desde 2022 hasta 2030.

La relevancia de un proceso fiable y eficiente en estas reparaciones es subrayada por expertos del ámbito del motor. En este sentido, la preparación adecuada desempeña un papel crucial para asegurar la excelencia en el trabajo y la plena satisfacción del cliente.

Es por ello que en este artículo os traemos los 6 pasos para gestionar el reemplazo de piezas plásticas.

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6 pasos para gestionar el reemplazo de piezas plásticas

A continuación, desde TallerGP os mostramos los 6 pasos claves para llevar a cabo este reemplazo.

Paso 1: atemperar la pieza plástica

El proceso comienza atemperando el paragolpes de plástico nuevo sin imprimación, o cualquier otra pieza plástica nueva, durante 60 minutos a una temperatura de entre 60°C y 65°C

Este paso permite liberar restos de agentes desmoldeantes y facilita la limpieza y preparación posteriores.

Paso 2: limpiar la pieza plástica

Una vez atemperada, se procede a limpiar la pieza plástica con un desengrasante adecuado utilizando un paño fino para ello.

Este proceso elimina sustancias contaminantes y agentes desmoldeantes, preparando la superficie para la siguiente fase.

Paso 3: limpieza adicional

Se realiza una limpieza adicional con una bayeta desengrasante humedecida con un limpiador o desengrasante adecuado para plásticos. 

Tras limpiar, se espera a que se evapore cualquier resto de disolvente en el sustrato plástico.

Paso 4: eliminar electricidad estática

El paso 4 implica pasar un paño atrapapolvo y utilizar una pistola antiestática para eliminar la electricidad estática y neutralizar cualquier carga electrostática en el plástico. 

Esto asegura un mejor flujo de la pintura en las capas posteriores.

Paso 5: aplicación de imprimación-aparejo

Para obtener un asentamiento óptimo de la imprimación-aparejo, se recomienda el uso de una pistola con una boquilla de 1,3 mm o 1,4 mm, con una presión de entrada de 1,5 a 1,8 bar y una presión en la pistola de entre 22 y 26 psi. 

Paso 6: lijado y preparación para la base bicapa

Después de solo 5 minutos de secado, la pieza plástica nueva se puede lijar suavemente para eliminar partículas de polvo utilizando una almohadilla de lijado ultrafina de doble cara. 

Posteriormente, la pieza plástica está lista para recibir la base bicapa.

Beneficios de la reparación de piezas plásticas

La reparación de piezas plásticas no solo es una práctica común, sino que también conlleva una serie de beneficios tanto para los talleres como para los propietarios de los vehículos. Estos beneficios abarcan desde consideraciones económicas hasta impactos positivos en la durabilidad y estética de los automóviles. 

A continuación, se detallan algunos de los principales beneficios:

Sostenibilidad económica

La reparación de piezas plásticas tiende a ser más económica en comparación con la sustitución completa de la pieza. Esto permite a los propietarios ahorrar costes significativos en reparaciones, especialmente en situaciones donde la pieza no ha sufrido daños estructurales graves.

Conservación del medio ambiente

Optar por la reparación en lugar de la sustitución contribuye a la reducción de residuos. Al extender la vida útil de las piezas plásticas, se minimiza la necesidad de producir y desechar nuevas piezas, promoviendo prácticas más sostenibles con el medio ambiente.

Rápido tiempo de reparación

La reparación de piezas plásticas suele requerir menos tiempo en comparación con el proceso de sustitución. Esto permite una rápida devolución del vehículo al propietario, reduciendo el tiempo de inactividad y brindando mayor conveniencia.

Conservación de la estética del vehículo

Al reparar piezas plásticas en lugar de reemplazarlas, se mantiene la coherencia estética del vehículo. La pintura y los acabados originales pueden ser preservados, evitando discrepancias visuales que podrían ocurrir con piezas completamente nuevas.

Versatilidad en la reparación

La reparación de piezas plásticas permite abordar una amplia gama de daños, desde arañazos y abolladuras hasta grietas y roturas. Los profesionales del sector pueden aplicar técnicas especializadas para restaurar la funcionalidad y la apariencia de las piezas afectadas.

Satisfacción del cliente

Los propietarios de vehículos a menudo prefieren soluciones que no solo sean económicas, sino que también mantengan la integridad original de su automóvil. La reparación de piezas plásticas ofrece una opción que cumple con estas expectativas, generando mayor satisfacción entre los clientes.

Menor impacto en la pintura

En comparación con la sustitución de piezas, la reparación minimiza la necesidad de repintar áreas extensas del vehículo. Esto preserva la calidad y la durabilidad de la pintura original, evitando variaciones en el color y brillo.

Este proceso meticuloso y eficiente, respaldado por la experiencia de Spies Hecker, asegura no solo la calidad estética de las reparaciones, sino también la durabilidad y la satisfacción del cliente. 

Con estos seis consejos, los talleres pueden enfrentar con confianza el desafío de la reparación de piezas plásticas, contribuyendo al rendimiento óptimo de los vehículos y la reputación positiva del taller.

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