La colorimetría se ha convertido en uno de los aspectos más importantes en un taller de chapa y pintura ya que es un factor a tener en cuenta para que la rentabilidad del negocio aumente y ofrecer un servicio así, de calidad, a nuestros clientes.

Esto ha provocado además, que la aparición de nuevos tonos, colores, y técnicas haya hecho que se convierta en un gran desafío para los profesionales.

Contar con los productos y herramientas adecuados, junto con un gran conocimiento y profesionalidad sobre la colorimetría, conseguirá un resultado de éxito y satisfactorio para el cliente. Hoy os contamos todo lo que esta técnica puede ofrecernos.

¿Qué es la colorimetría en carrocería?

Desde el punto de vista más técnico, esta es una ciencia que basa su estudio en el color, creando así procesos para medir de forma cualitativa y cuantitativa la percepción del color por parte de las personas. 

Si esto lo trasladamos al punto de vista de un taller de carrocería, la colorimetría la definimos como un conjuntos de métodos y herramientas usados para mejorar y la integración del color durante la reparación. En otras palabras, con la colorimetría conseguimos integrar de forma correcta las piezas reparadas sin que existan diferencias apreciables en el color.

¿Cuáles son los factores que influyen en la forma en la que percibimos el color de un vehículo?

El color está asociado de forma inevitable al diseño y a la estética de un vehículo, que incluye de forma directa en su comercialización. Por ello, no es de extrañar, que se destinen muchos medios para investigar en los sistemas tintométricos y descubrir nuevos colores con los que captar la atención de los usuarios.

Es habitual, que el código de color de un vehículo nos muestre varias variantes que se crean con el fin de cubrir las pequeñas desviaciones de tonalidad que pueden surgir. Estas son provocadas por factores como el proceso de fabricación, el material, la temperatura o la humedad.

Sin embargo, la percepción de los colores está marcada de forma subjetiva por el ojo humano. Veamos algunos de los causantes que provocan esta percepción subjetiva:

Fuente de iluminación

Un mismo color puede mostrar diferencias bastante significativas en función de si lo observamos a la luz natural del día, con una luz artificial del taller o simplemente por el color de la luz.

Esto es un fenómeno que recibe el nombre de metamerismo y que causa diferencias en el color en función de la luz que incida sobre el objeto. Es bastante común en el día a día de un taller y puede marcar desigualdades en la igualación de color de una pieza, marcando así un proceso de menor calidad.

Objeto

En este caso, cuando hablamos de objeto nos referimos al propio vehículo y es que la superficie de este tendrá una mayor o menor capacidad para absorber y reflejar la luz recibida. Cuanto más grande es la cantidad de luz que absorba el objeto, menor será su capacidad de reflejo, lo que nos dará un color más oscuro.

Ojo humano

Cada persona percibimos una realidad distinta y personal. Con los colores ocurre muy a menudo y es que cuando visualizamos el objeto, mandamos la percepción de color recibida a nuestro cerebro. Es este quién lo transforma, y le da un nombre.

Métodos y herramientas para mejorar la colorimetría en el taller

El profesional de chapa y pintura cuenta con una serie de herramientas y productos que facilitan en su día a día su labor para optimizar la igualación de color. A continuación, os traemos algunas de las más conocidas y usadas:

Carta de color

La carta de color, contiene una serie de pastillas pintadas con cada código de color y las posibles variantes.

Estas están pintadas a mano y organizadas cromáticamente para que su búsqueda y localización sea más rápida. Esto hace que su fiabilidad en cuanto a la igualación del color aumente notablemente. Con estas pastillas se muestra de una manera real la pintura aplicada en condiciones que son muy similares al día a día de un taller.

Espectrofotómetro

Esta herramienta se ha ganado su popularidad gracias a su fiabilidad para obtener la información precisa sobre el código de color de un coche. Un paso más allá de la carta de color.

El espectrofotómetro es capaz de medir la longitud de onda del color exacto que está midiendo. Este ofrece la fórmula de color que mejor se ajusta al color de la superficie. Cuenta con una extensa base de datos llena de fórmulas de color y un gran software para su gestión. Esto hace que el profesional pueda acceder de forma rápida a cualquier fórmula registrada para poder igualarla de forma óptima.

Probetas de aplicación

Otro método es la aplicación del color sobre probetas para comprobar el nivel de igualación del color sobre la superficie del vehículo. Podemos mejorar la colorimetría sabiendo con seguridad el número de capas a aplicar manteniendo las condiciones de aplicación.

No obstante, es un proceso que necesita bastante tiempo para la preparación de la mezcla, la aplicación, el secado, etc.

Lámparas de luz

Con una pistola de luz cuya proyección es similar a la luz natural, podremos comprobar los matices de color, o los posibles defectos. Con la pistola de luz, podemos optimizar la comprobación del color simulando diferentes condiciones.

En definitiva, contando con las herramientas adecuadas y los productos apropiados, la reparación del color es una tarea cuyo resultado puede ser de éxito.